introducción

Un servicio invocado por la necesidad

La historia del perro ha ido cambiando: antes era considerado principalmente un animal de cuidado y se lo dejaba fuera de las viviendas, hoy se lo ha humanizado casi como un miembro de la familia y, en muchos casos, ha sido aceptado dentro de nuestros hogares, sobre nuestras alfombras y sillones para jugar con nuestros hijos. La relación con nuestros perros se ha vuelto más estrecha y mayores son las atenciones y cuidados que les proporcionamos a ellos. Sin embargo, son pocas las instalaciones que facilitan la relación con estos afectuosos animales, que son justamente definidos «los mejores amigos del hombre».

Wash Dog nace para llenar una laguna por mucho tiempo descuidada, ofreciendo un servicio higiénico y sanitario para la limpieza del perro. Nuestro lavadero 24hs brinda la posibilidad de mantener perfectamente limpios nuestros amigos animales de modo simple, veloz, seguro, práctico y económico.

La historia de Wash Dog

Luego de haber evaluado el interés que giraba entorno a los automatismos y en particular modo a los sistemas hechos por uno mismo, nos movilizamos para crear nuestro innovador sistema de autos lavado de perros 24 horas. Inicialmente esta idea ha sido analizada a través de un pequeño sondeo, que buscaba comprender cuales podían ser las potencialidades de dicho servicio en relación a la clásica fórmula de peluquería canina profesional o de lavado doméstico del animal. La idea de partida surgió del hecho que no es necesario desordenar tu vivienda para lavar el perro (o el gato), como no es necesario preocuparse de fijar citas generalmente incómodas. Nosotros queremos ofrecer la posibilidad de proceder personalmente al lavado, utilizando equipamiento especialmente creado a tal fin y sin preocuparse por el tiempo, en tanto que la tienda está abierta las 24 horas del día. Así el 5 de mayo de 2001 en Gessate (MI) abre la primera tienda Wash Dog, un revolucionario auto lavado para perros abierto las 24 horas del día.

El proyecto se presenta desde el inicio como una idea triunfante: el primer año se contabilizaron, de hecho más de 1.300 inscriptos. La actividad de la franquicia inicia en el año 2003 y desde entonces Wash Dog continua en constante crecimiento.

Cada Wash Dog no es únicamente un auto lavado para perros. Gracias a los servicios integrados ideados en los últimos años, las tiendas se convirtieron en verdaderos centros de belleza y bienestar donde el dueño puede dedicarse personalmente no solo al lavado sino también al cuidado y la salud de su amigo.